La ausencia de los gorriones

Autor: Jesús Muñiz González
On 18 junio, 2021

La ausencia de los gorriones le restaba vitalidad a la plaza.

Cruzamos muy despacio la calle y entonces me di cuenta que la anciana tenía muchos más años de lo que yo creía.

Pedí una manzanilla y un té negro.

Mientras nos sirvieron recobró el aliento y comenzó a contarme su historia.

“Mi nombre es Alba. Nací en Santo Domingo, aunque mis padres son españoles. Ellos querían que me criara aquí, así que cuando cumplí los cinco años, ya lo tenían todo arreglado para venirse a España.

En Punta Cana la familia regenta un hotel de lujo, y con algunos pequeños negocios más en la isla, se obtienen los ingresos para llevar una vida holgada, económicamente.

Varias veces en el año mi padre viajaba allá para atender el negocio. Un hermano de mi papá era el director.

Pero no quiero aburrirte con mi historia familiar.

Lo importante es que ya desde niña me interesaron todos los seres vivos, tanto los del reino vegetal, como el animal.

Aunque mis padres querían implicarme en los negocios de la familia, al final conseguí salirme con la mía.

Me fui a estudiar biología a Stanford.

Luego me especialicé en el estudio de las aves y para terminar, cuando me enteré del proyecto de exterminio de los gorriones en China, me interesé por estas aves.

El motivo de los chinos es porque se comían el grano.

Nunca aprendemos de la historia a no cometer errores. Porque esto ya lo habían intentado antes los egipcios.

En definitiva, que comencé a estudiar a los gorriones.

Para mí, el principio fundamental, es que todos los seres vivos tienen una función en la vida del planeta.

Lo primero fue interesarme por todo lo que se había publicado acerca de estas aves.

De este modo me adentré en el conocimiento de un mundo nuevo y sorprendente.

Te haré un resumen para no cansarte ni aburrirte.

Los gorriones son una especie cuya existencia en el planeta va paralela a la del hombre.

La realidad es que se trata de un animalito doméstico, aunque no domesticado.

Cuando el hombre comenzó a cultivar grano, el gorrión encontró una despensa maravillosa en los cultivos de cereales.

Eso provocó a su vez que se le considerara una plaga.

Craso error, pues aunque se comen una buena cantidad de grano, lo compensan alimentándose también de algunos insectos que, de otro modo, su reproducción masiva acabaría con toda la cosecha.

Así nos lo ha demostrado la historia, por ejemplo, con las plagas de langosta.

Claro que ahora, aunque no se les combata como una plaga, nuestras costumbres urbanas, sobre todo, hacen peligrar su existencia.

La ausencia de los gorriones es el preludio de un desierto de cemento.

Por eso es muy importante estudiar y conocer a los gorriones, porque su existencia está íntimamente vinculada a la nuestra.

Lo más sorprendente está en su canto.

El canto de los gorriones abrió un mundo nuevo para mí.

¿Sabes? Cuando no oímos su canto, el semáforo está en rojo: ¡Peligro!

Su existencia va unida a la nuestra. La ausencia de los gorriones anuncia el fin de la humanidad.

Al estudiar el canto de los gorriones, lo primero que aprendí es que ellos aprenden a cantar, igual que nosotros aprendemos a hablar.

Luego estudiar su canto era primordial.

Ellos se comunican con su canto igual que nosotros con el lenguaje.

Como comprenderás entender ese lenguaje solo era cuestión de tiempo.

Te puedo decir que entiendo perfectamente sus conversaciones.

Claro que lo mejor es que he logrado que ellos me entiendan.

Lo cierto es que han aprendido mucho de nuestro lenguaje.

Como su percepción del lenguaje humano es solo por el sonido, en realidad ellos comprenden igual en español o en chino.

No entienden las palabras, por el sonido perciben lo que les interesa saber. Eso es suficiente.

En definitiva, te puedo decir, que puedo tener una conversación más o menos fluida con los gorriones.

Seguramente piensas que soy una vieja chiflada, que se me ha ido la cabeza.

No importa, yo te puedo mostrar todo lo que digo. Lo podrás ver con tus propios ojos. Aunque entonces es posible que pienses que el chiflado eres tu.

Al terminar la infusión, me puedes acompañar al Castro para tener una agradable conversación con los gorriones.

Afortunadamente todavía quedan algunos árboles en la ciudad para que puedan anidar.

La ausencia de los gorriones todavía no es dramática en nuestra ciudad.

Es increíble como puede haber personas que así mismo se llaman progresistas, hablan de libertad, y cortan árboles.

Como si conservar la vida del planeta estuviera reñido con la libertad.

Seguramente todo el mundo consideraría una crueldad matar gorriones a pedradas para hacer una merienda de pajaritos fritos.

Sin embargo, una amplia mayoría de personas permanece indiferente ante el uso de pesticidas u otras prácticas nocivas para evitar que se coman el grano.

Tómate el té que se enfría.

 

La ausencia de los gorrionesJesús Muñiz González

Posts relacionados

La cinta mágica

La cinta mágica

La cinta mágica 1845, sueño núm. 11 “Me pareció encontrarme en una extensa llanura, cubierta por un número incontable...

Comentarios

1 Comentario

  1. MAITE SERRA

    Me ha encantado el relato de los gorriones, asimismo los dones de San José

    Responder

Enviar un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *